Desde que fue abandonada, el hogar de Elizabeth han sido los libros. Ha crecido rodeada de Grimoires (libros mágicos que contienen vida además de historias), los cuales se encuentran bien resguardados ya que, todos los hechiceros son malvados, y todos los derivados de encantamientos también. El sueño de Elizabeth es convertirse en una cuidadora de la biblioteca, con el objetivo de proteger al reino de los poderes ocultos en los libros.
Pero un día, uno de los grimoires más peligrosos de la biblioteca es liberado, y Elizabeth intenta intervenir para salvar a todos, pero terminará siendo acusada de ser la culpable del crimen. Por lo que será juzgada y el encargado de ocuparse es nada menos que un hechicero llamado Nathaniel Thorn, que junto con su demonio sirviente vendrán a buscarla, y pronto los tres se verán envueltos en una conspiración que lleva cientos de años en proceso, y Elizabeth tendrá que desafiar todas sus enseñanzas para encontrar al verdadero culpable y aprender a confiar.
Opinión:
Tenía un poco de miedo en leer este libro ya que no disfruté demasiado de An Enchantment of Ravens, el anterior libro de la autora. Pero después de haber escuchado tantas buenas críticas me terminaron convenciendo de empezarlo. ¡Y lo bien que hice! El libro es super atrapante, la descripción del mundo y los personajes es realmente única. Los poderes de los libros y la capacidad de convertirse en seres tan violentos me pareció muy bien descripta y planteada en la historia.
El personaje de Elizabeth me pareció super fuerte y decidida. Valiente sobre todo y capaz de enfrentar lo que le pusieran por delante, por sobre todo me gustó su perseverancia.
Nathaniel por su lado me pareció un personaje super fresco, diferente a cualquiera que haya leído, y el hecho de que perteneciera a la comunidad LGBT+ creo que le dio un toque que usualmente no suelen tener estos personajes por lo que lo hizo destacarse entre tantos libros que existen.
Incluso los personajes secundarios estaban muy bien pensados y todos aportaban algo a la trama. Sin duda fue lo que más me gustó de la historia. Aunque la construcción del mundo también estaba bien desarrollada, creo que pudo haber ido un poco más allá quizás explicando el origen de más cosas o en detalle el porqué del miedo a los hechiceros.
En el fondo es un libro que trata sobre la lealtad y la amistad, rodeado de un mundo fantástico que realmente me gustó. A pesar de que el romance no me convenció del todo y que hay algunas cosas que me han quedado sin explicar, me parece un libro bastante completo y lo super recomiendo.
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